De todos los miles de incidentes atípicos que podrían ocurrir durante un viaje en avión, lo ocurrido en este vuelo ocupa sin duda un lugar especial.
Por lo anecdótico, y más allá de que pueda parece cómico, en realidad la vida de los pasajeros estuvo en riesgo sin ellos haberse enterado.
Una pelea que pudo acabar mucho peor
Lo que se podría considerar una verdadera “pelea en las alturas” ocurrió el pasado mes de junio en un vuelo que partió de Ginebra con destino a París a bordo de un avión Airbus A320 de la aerolínea Air France, según informó el medio de comunicación La Tribune.
Según la información dada a conocer, el incidente fue provocado porque el copiloto no ejecutó una orden que el primer oficial (es decir, el piloto) le había dado. Mientras que uno de los involucrados señala que el primer contacto físico se trató de un golpe involuntario, el otro asegura que fue una bofetada con toda intención
Sea como sea, la situación terminó en un intercambio de puñetazos que pudo poner en grave riesgo el vuelo y por ende la vida de todas las personas a bordo, lo que afortunadamente no pasó. Sin embargo, luego del incidente fue necesario que uno de los tripulantes de vuelo permanezca en la cabina hasta el aterrizaje para vigilar a los dos hombres.
Los tripulantes implicados en la pelea tuvieron que ser separados
La prestigiosa aerolínea francesa por su parte ha tenido que reconocer el incidente, argumentando que lo ocurrido se trató de “gestos inapropiados”. De momento ambos pilotos se mantienen separados de sus labores en lo que duran las investigaciones para decidir su futuro laboral en la compañía.
Por su parte la Agencia de Investigación Aérea de Francia (BEA) ha comentado que los pilotos de Air France “carecen de rigor a la hora de respetar los procedimientos durante los incidentes de seguridad.”
La rigurosa preparación mental de un piloto comercial
En términos de preparación mental, un piloto comercial debe estar altamente capacitado en el conocimiento de la aeronáutica, las leyes y regulaciones de la aviación, y los sistemas de control y navegación. Además, deben ser capaces de tomar decisiones rápidas y precisas en situaciones de alta presión, como emergencias a bordo o condiciones climáticas adversas.
Para lograr esta preparación mental, deben pasar por un riguroso programa de capacitación que incluye clases teóricas, simulaciones de vuelo y entrenamiento en aeronaves reales. Este entrenamiento les permite familiarizarse con el entorno de la cabina de pilotaje y las habilidades necesarias para manejar situaciones de vuelo críticas.
La preparación emocional también es una parte vital de la capacitación de un piloto comercial. Deben llegar a ser capaces de manejar el estrés y la ansiedad que pueden surgir en situaciones de vuelo intensas. La preparación emocional incluye habilidades como la autoconciencia, el autocontrol y la resiliencia emocional, que permiten al piloto mantener la calma en situaciones estresantes.
La psicología también juega un papel importante en su preparación. Los pilotos deben ser examinados regularmente para detectar posibles problemas psicológicos que puedan afectar su desempeño. Los exámenes incluyen evaluaciones de aptitud, pruebas de personalidad y entrevistas con psicólogos especializados en aviación.
Además, los pilotos comerciales deben ser capaces de trabajar en equipo con otros miembros de la tripulación y comunicarse de manera efectiva. Esta habilidad se desarrolla en parte durante el entrenamiento en simuladores de vuelo, donde los pilotos trabajan en equipo para resolver problemas y tomar decisiones críticas.
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